Cómo decorar un aparador con un espejo (y conseguir un efecto deslumbrante)
Cómo decorar un aparador con un espejo (y conseguir un efecto deslumbrante)
por: Laura Fortuño | ir al artículo

No hay día sin noche ni casa sin espejos. Esta pieza se ha convertido en un imprescindible en cualquier hogar, ya no solo por la funcionalidad que ofrece, sino porque puede convertirse en un objeto decorativo por sí solo. Y si lo combinas con un aparador, el resultado es irresistible.
Se han usado para predecir el futuro, para canalizar la energía, incluso como puerta de entrada para los espíritus malignos. Lo cierto es que los espejos han dado para mucho a lo largo de la historia. En el siglo XXI nada queda ya de aquellos mitos que los han acompañado durante miles de años: ahora son, simplemente, un elemento decorativo imprescindible en cualquier hogar.
Los espejos dan sensación de amplitud, multiplican la luz y crean profundidad. Si los colocas bien, puedes conseguir que una habitación pequeña parezca más grande, llenar de luminosidad un rincón oscuro o lograr que un pasillo estrecho gane amplitud visual.
Te damos las claves para combinarlos con tu aparador y sacarles el máximo partido. Prepárate para reflejar estilo a raudales.
¿Cómo decorar tu aparador con un espejo?
Dicen que los aparadores son los grandes comodines de la decoración. Su versatilidad los convierte en el mejor aliado para completar el estilo y el almacenaje de salones, recibidores, dormitorios y pasillos.
Su horizontalidad les permite encajar en muchos espacios de la casa y existe una gran variedad de estilos, materiales y acabados entre los que elegir. Pero una vez hayas encontrado el aparador de tus sueños, llega el momento de decorarlo, y para ello, nada mejor que un espejo. Ten en cuenta estas ideas para conseguir el mejor resultado.
Alinea todo al centro
Si alineas el espejo con el centro del aparador, conseguirás crear simetría y una sensación de orden en el espacio. Para un efecto más impactante, puedes colocar un aplique de luz a cada lado. Sin ir más lejos, este aplique dorado es perfecto para crear un ambiente cálido y agradable en cualquier estancia.
Elige la altura correcta
Algo tan sencillo como la altura a la que cuelgues el espejo puede marcar la diferencia. Lo ideal es dejar entre 10 y 20 cm de distancia entre la parte superior del aparador y la base del espejo. Así consigues que el espejo no quede demasiado pegado al mueble y que los dos elementos “respiren” visualmente.
Armonía visual
Si tienes otros elementos decorativos cerca del aparador, como cuadros o lámparas de pie, te recomendamos que mantengas una alineación común entre ellos y el espejo.
Y si el aparador está debajo de una ventana, puedes alinear el espejo en función de la altura del marco de la ventana. Así mantendrás un flujo visual contínuo.
A un lado
Puedes añadir profundidad y amplitud visual a la estancia si colocas el espejo al lado del aparador. Es una disposición que aporta un aire desenfadado y moderno, además de generar un interesante efecto estético.
Elige un marco que combine con el estilo del aparador si quieres un resultado armónico, o juega con los contrastes si prefieres un toque más dinámico. En Kenay Home podrás encontrar distintos modelos de espejos verticales que quedarán genial con esta combinación, como por ejemplo, este espejo de pie fabricado en metal con marco dorado. Elegancia pura para embellecer cualquier estancia.
Equilibrio
A la hora de alinear el espejo con el aparador también tienes que tener en cuenta el tamaño del espejo.
Si es más ancho que el aparador, deja un margen igual en ambos lados, así mantendrás el equilibrio. Si el espejo es más estrecho que el aparador, céntralo y deja un espacio proporcional en cada lado para crear una sensación visual más ordenada.
Tipos de espejos para combinar con un aparador
El tamaño, la forma y el diseño del espejo que coloques encima del aparador influyen en el resultado final y definen la decoración de la estancia.
Estos son los tipos de espejos que mejor combinan con un aparador.
Espejos rectangulares grandes
Si buscas un resultado deslumbrante que no deje indiferente a nadie, los espejos rectangulares de gran tamaño te lo darán. Lo bueno de este tipo de espejos es que añaden altura visual a la estancia, así que tu salón o comedor parecerá incluso más amplio y luminoso.
Los espejos rectangulares grandes son perfectos para colocar sobre aparadores largos, equilibrando así las proporciones. Nos parece irresistible este espejo con marco de metal negro y un diseño abstracto de líneas finas. Originalidad XL para que tus paredes luzcan en todo su esplendor.
Espejos con curvas
Los espejos redondos o con curvas son una opción genial para colocar encima de un aparador porque contrastan con las líneas rectas de este mueble. Un espejo curvado rompe la rigidez de un aparador cuadrado o rectangular, dando un toque muy moderno a la estancia.
Si son pequeños, puedes combinar dos espejos en diferentes tamaños. Por ejemplo, fíjate qué bien se llevan este espejo pequeño de bambú, con forma ovalada, y su hermano mayor, este espejo grande. Juntos, no solo llevan la decoración de cualquier pared a otro nivel, sino que también potencian la luminosidad y la amplitud visual de cualquier habitación.
Espejos con marco
Para añadir un toque de elegancia a tu aparador, una elección muy acertada son los espejos con marco. Hay una infinidad de opciones para elegir: acabados mates o brillantes, con o sin detalles, diversidad de colores…
Una recomendación: este precioso espejo compuesto a base de madera de mango, elaborado completamente de manera artesanal. Nunca pasa de moda y su acabado natural da una sensación de calidez absoluta.
Espejos con marco mínimo
Si prefieres un look más minimalista, puedes optar por un espejo sin marco o con un marco muy fino. Esta opción encaja en casi cualquier tipo de decoración, consiguiendo una sensación de ligereza y simplicidad en la estancia.
Es la mejor decisión si quieres que el espejo sea un elemento decorativo más sin que destaque por encima de otros componentes. Por ejemplo, este espejo redondo elaborado en metal y con un fino acabado dorado es perfecto para darle un aire sofisticado a tu hogar.
Espejos artísticos
Para que tu aparador tenga un toque más atrevido, los espejos con formas irregulares son ideales porque rompen con la simetría del espacio. Además, no todo el mundo se lanza con ellos así que conseguirás llenar tu salón o comedor de personalidad y originalidad.
Aquí tienes una idea diferente y creativa para darle un toque exclusivo a tu aparador: este espejo con líneas rectas e irregulares, dispuestas de forma ovalada. Además está fabricado en ratán, un material natural con el que la estancia adquirirá un carácter único.
¿Colgado en la pared o apoyado?
Ya sabes lo que dicen: para gustos, colores. Por comodidad y para que no se caigan, conviene colgar en la pared los espejos de tamaño pequeño o mediano.
En el caso de los espejos grandes, también quedarán genial apoyados sobre el aparador. Además es un truco estupendo si no quieres taladrar la pared. Eso sí, un consejo profesional: para mayor seguridad puedes fijarlo discretamente con soportes antideslizantes en la base o con un anclaje oculto en la parte trasera.
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