Cómo decorar la pared del cabecero de la cama con estilo

Cómo decorar la pared del cabecero de la cama con estilo

por: Laura Fortuño | ir al artículo

Hay quien piensa que el cabecero es el elemento que decora la pared de la cama y que no hace falta nada más. Pero eso es porque no conoce todas nuestras ideas para completar ese espacio y convertirlo en el rincón con más personalidad de toda la estancia.

Es probablemente la última imagen que se fija en tus retinas antes de irte a dormir. Así que de ella depende que tengas o no “dulces sueños”. Hablamos de la pared del cabecero de la cama, uno de los elementos clave en la decoración de una habitación que puede transformar la estancia por completo. Y es que además de acompañarte en un cálido y placentero sueño, el cabecero de tu cama tiene otro súper poder: definir completamente el estilo de tu dormitorio. 

Ideas de decoración para la pared del cabecero

La pared del cabecero de tu cama es como un lienzo en blanco que te va a permitir añadir estilo y personalidad a tu dormitorio. Estos consejos creativos te ayudarán a decorarla y que tu habitación se convierta en un refugio único. 

Punto de partida: el color de la pared

Con esta elección empieza todo. Elegir tonos neutros o suaves para la pared del cabecero de tu cama puede dar a la habitación grandes de dosis de calma y serenidad, mientras que si te atreves con colores más llamativos o profundos, como el azul marino o el gris oscuro, puede aportar sofisticación y profundidad a la estancia. 

Una idea muy sencilla y efectiva es pintar media pared de un color neutro y la otra media de un tono más vibrante. El resultado es muy potente y queda fenomenal incluso aunque no pongas cabecero. 

Apuéstalo todo al papel pintado

Otra opción que gana cada vez más adeptos es empapelar la pared del cabecero. Esta alternativa transforma por completo la estancia y permite jugar con una amplia variedad de estilos, desde diseños florales que aportan un aire nostálgico hasta patrones geométricos que añaden un toque moderno. 

Si lo que quieres es crear un ambiente 100% relajante y acogedor, que conecte con el entorno natural, te recomendamos que te decantes por un papel pintado con elementos de la naturaleza, como este papel con motivo botánico en tonos verdosos, que da un toque original y elegante a cualquier estancia, o este exótico papel pintado con hojas de Philodendron, que hará relucir el lado más ‘chill’ de tu hogar. 

Ilumina y vencerás

Presta atención a la iluminación de la pared del cabecero, porque ahora se llevan los apliques de pared, una opción que no solo es práctica, sino también muy estilosa y permite ahorrar espacio.
 

Hay infinidad de diseños y estilos, desde clásicos hasta más chic, perfectos para los amantes de las tendencias. Este aplique de rafia y lino nos encanta, porque sus materiales y su diseño harán de tu dormitorio un lugar más acogedor y agradable.

Cuadros y láminas

Últimamente se ha puesto de moda decorar una pared con cuadros, láminas o fotografías enmarcadas, así que te sugerimos utilizar este estilo para darle un toque muy singular a la pared de tu cama. Puedes combinar distintos cuadros, y si aceptas un truco, antes de ponerte a hacer agujeros en la pared, haz tus composiciones en el suelo, así puedes probar si te gusta.
 

Dos recomendaciones que quedarán bien con cualquier decoración: este cuadro con un diseño de flores preservadas sobre un fondo blanco, que se puede combinar con otros cuadros también de nuestro catálogo, como lavanda, lagurus o paniculata, y este cuadro de papel fotográfico que aporta un aire romántico a la estancia.

Estantería decorativa

Una solución práctica y original es aprovechar el espacio encima del cabecero para colocar una balda de madera o estantería. Sobre ella puedes apoyar cuadros, objetos decorativos o incluso plantas. Además de ser un sistema bonito, si tu habitación es estrecha te puede servir como mesita de noche y así disponer de más espacio en los laterales de la cama. 

Accesorios

Los complementos decorativos te ayudarán a diseñar la pared de tu cabecero con un toque único y personal. Una opción es vestir la pared del cabecero con un espejo. Si la habitación es pequeña, además, te ayudará a crear sensación de amplitud.

Elige un espejo que tenga un toque diferente, como por ejemplo, un marco original. Otra opción es colocar un tapiz, que da una pincelada nostálgica a la estancia. Y si quieres un aire singular y original en tu dormitorio, atrévete con los kakemonos, muy comunes en la decoración japonesa. Por ejemplo, este kakemono de tela y madera que aportará matices frescos y naturales a la pared de tu cabecero. 

Cabecero tapizado Ilan
Aplique de pared Wall

¿Cómo elegir el cabecero de cama ideal?

Hasta ahora hemos hablado de la pared, pero la elección del cabecero también es importante: tapizado, de madera, industrial, con mesitas integradas… Hay opciones para todos los gustos, pero si quieres acertar, ten en cuenta qué estilo quieres en la habitación: clásico, moderno, industrial, rústico… y también el tamaño, ya que si es pequeña, no deberías inclinarte por un cabecero muy grande.

Respecto al color, intenta que continúe la misma gama cromática que el resto de la estancia. Un consejo: si la habitación es espaciosa, puedes elegir un cabecero oscuro que marque un toque de profundidad y contraste. Si por el contrario es pequeña, quedará mejor un cabecero en tono claro. 

¿Qué material elegir para mi cabecero?

Los materiales son un factor clave, porque cada uno aporta una estética y acabados diferentes. Aquí entra en juego el estilo decorativo de la estancia pero también tus preferencias personales.

Los cabeceros de madera son clásicos y atemporales, pudiendo tener un acabado liso y moderno o un toque más rústico. Es lo bueno de la madera, que dependiendo del color se puede compaginar con cualquier estilo decorativo. Algunos diseños, como este cabecero elaborado en ratán, pueden ser muy originales. 

Los cabeceros tapizados son una opción ideal para quienes buscan comodidad y suavidad. Suelen estar acolchados, así que son perfectos si pasas tiempo sentado o sentada en la cama para leer, trabajar o ver la tele. Hay algunos muy elegantes, como este cabecero tapizado con el ribete en color negro que consigue un ambiente sofisticado y exclusivo. 

Los cabeceros de metal aportan un aspecto industrial y además son duraderos y resistentes. Su acabado puede variar desde tonos mate hasta acabados pulidos, añadiendo un toque único a cualquier dormitorio.

Como ves, el cabecero y la pared donde se ubica no son solo unos elementos decorativos más de tu dormitorio: se tratan de piezas clave que aportan personalidad, definen el estilo y pueden transformar por completo el ambiente de tu habitación. 

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