por: Laura Fortuño | ir al artículo
Las habitaciones infantiles no solo son la estancia con más encanto de la casa, sino que además se trata de uno de los espacios más versátiles: durante el día se convierten en el centro de actividades como juegos o lecturas, y por la noche se transforman en el lugar para conciliar un plácido sueño. La iluminación debe mimarse al detalle para que se adapte a esta multifuncionalidad.
La habitación del bebé reclama un cuidado especial. Es ese rincón donde cada detalle se elige con cariño y donde se puede soñar sin dormir. Por eso, decorar el cuarto del bebé es mucho más que elegir muebles: es crear un refugio de calma, ternura e imaginación.
La luz puede marcar la diferencia entre tener una simple habitación de bebé o tener, además, un espacio donde se sienta seguro, confortable, tranquilo y acompañado desde el primer día.
La iluminación transforma por completo el ambiente de cualquier espacio. Ya vimos los diferentes tipos de luces en una vivienda, y hoy vamos a centrarnos en una de las estancias más especiales: la habitación de tu bebé.
¿Cómo tiene que ser la luz de la habitación del bebé?
Estas son las claves:
1. Debe ser suave: la luz intensa o directa no es cómoda para el bebé.
2. Se tiene que adaptar a las diferentes rutinas del bebé: descanso, juego o aseo personal.
3. Materiales suaves y tonos claros: así se consigue crear un estilo armonioso y acogedor en la habitación de tu bebé que invita al descanso.
4. En la habitación de tu bebé, mantener un entorno limpio es aún más importante, ya que su sistema inmunitario está en plena formación. Por eso, elige lámparas fáciles de limpiar que te permitan deshacerte fácilmente del polvo.
Ideas de lámparas para el cuarto del bebé
Ahora que ya sabemos lo importante que es iluminar correctamente la habitación de tu bebé y cuáles son las claves para conseguirlo, vamos con algunos ejemplos para poder disfrutar al máximo de la estancia con más encanto de la casa.
Las mejores lámparas de techo para la habitación de tu bebé
La lámpara de techo es la iluminación principal del cuarto del bebé. Debe crear una atmósfera cálida y acogedora.
Blanco: un color con el que acertar siempre
El blanco es un color que envuelve el espacio y consigue una sensación de calma, lo que es imprescindible en el cuarto del bebé.
Si además eliges una lámpara de seda con forma redonda y relieve, conseguirás impregnar de armonía y paz la estancia, mientras disfrutas de una luz uniforme y repartida.
Materiales naturales: calidez en estado puro
En los primeros meses de vida, todo lo que rodea al bebé influye en cómo se desarrolla y percibe el mundo. Elegir lámparas elaboradas con materiales naturales como fibras, madera o tejidos orgánicos ayuda a su bienestar.
Una bonita lámpara de techo con pantalla doble de rafia natural con ribete en blanco será perfecta para aportar un toque de calidez y estilo al cuarto de tu bebé.
¿Qué lámparas de sobremesa encajan en la habitación del bebé?
Las lámparas de sobremesa son un elemento clave en la habitación del bebé. No solo aportan ese punto de luz cálido y acogedor que demanda la estancia, sino que también ayudan a crear una atmósfera tranquila que favorece el descanso.
Varios puntos de luz
La habitación del bebé es un espacio multifuncional y por eso, además de la luz del techo, necesitamos iluminación auxiliar.
Una luz complementaria llena de encanto es esta lámpara de sobremesa con cuerda de papel trenzado, que nos ha conquistado por ese acabado rústico que tanto nos gusta a la hora de decorar habitaciones.
Colores neutros
Un acierto seguro es utilizar una lámpara de sobremesa de materiales naturales y colores neutros. De esta forma se aporta una sensación de calma y bienestar que crea un ambiente relajado, ideal para los momentos con tu bebé.
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